La tensión entre el expresidente estadounidense Donald Trump, candidato del Partido Republicano a las elecciones de este año, y el príncipe Harry no ha hecho más que incrementarse en las últimas horas. ¿El motivo? Está claro: el político afirmó que no dudaría en deportarlo de ser necesario.
Y no es la primera vez que menciona la deportación de Estados Unidos del nieto de Isabel II. Esta vez, no ha dudado en sugerir que el príncipe no obtendría “privilegios especiales” si se descubría que falsificó mucha información en su formulario para obtener el visado de residencia.
“Tendremos que ver si saben algo sobre las drogas. Si mintió, se tendrán que tomar las medidas apropiadas”, declaró Trump en una entrevista desde su residencia de Mar-a-Lago con Nigel Farage en GB News, emitida este martes 19 de marzo.
Y es que cabe destacar que el duque de Sussex vive en Estados Unidos desde 2020 junto a su mujer, Meghan Markle, y sus dos hijos, Archie (4) y Lilibet (2), obteniendo la residencia gracias a un visado. No obstante, en su autobiografía, reveló haber consumido drogas en el pasado.
Algo que, evidentemente, afecta a la obtención de dichos documentos, ya que cualquiera que solicita un visado para residir y trabajar en el país ha de enfrentarse a la pregunta ‘del millón’: “¿Es usted o ha sido alguna vez drogadicto o adicto?”.
En este contexto, el príncipe admitió haber consumido sustancias como el cannabis, la cocaína, la marihuana y los hongos alucinógenos, hecho que Trump no pasaría por alto bajo ningún concepto. De confirmarse, se tendrán que tomar las medidas oportunas.
Una serie de amenazas que, hasta la fecha, el expresidente no ha especificado. Ahora bien, en lo que sí ha hecho hincapié el candidato a la reelección es que, si gana el próximo 5 de noviembre, el príncipe Harry “estaría solo”. Harry no se ha pronunciado al respecto.
AS