El huracán Beryl tocó tierra este lunes en las costas de Texas, sur de Estados Unidos, con vientos de 130 km/h, causando lluvias, penetración del mar y cortes de energía, aunque deberá debilitarse mientras avanza en el territorio.
«El centro de Beryl llegó a tierra cerca de Matagorda, Texas», un balneario localizado en el condado del mismo nombre, al suroeste de Houston, según un reporte del estadounidense Centro Nacional de Huracanes (NHC) emitido a las 04:00 am hora local.
«Beryl se está moviendo tierra adentro sobre el este de Texas. En partes de Texas se están produciendo marejadas ciclónicas y fuertes lluvias que ponen en peligro la vida. Vientos dañinos continúan a lo largo de la costa, con fuertes vientos», agregó en otro reporte, una hora después.
Por sus características, Beryl se considera un huracán de categoría 1, como se denomina a aquellos con vientos de entre 119 a 153 km por hora.
Las autoridades habían previsto cortes de energía, producto del paso de Beryl. La madrugada de este lunes, unos 250.000 clientes se encontraban sin luz en Texas, según el sitio poweroutage.
El Servicio Meteorológico Nacional mantenía una alerta de tornado para algunas zonas de Texas, entre ellas Houston, ciudad de 2,3 millones de habitantes que se encuentra cerca de la trayectoria del ojo del huracán.
«Tenemos que tomarnos a Beryl muy en serio», dijo el domingo en conferencia de prensa el alcalde de la ciudad, John Whitmire. La madrugada de este lunes, Houston se encontraba bajo una lluvia intensa, acompañadas de ráfagas de viento.