Nicolás Maduro realizó la noche del pasado miércoles un ajuste a la bonificación complementaria del salario mínimo de los venezolanos, que incluyó a los pensionados del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y de Amor Mayor.
Desde el estado Bolívar, el dirigente de izquierda anunció el aumento del Bono de Guerra Económica a 50 dólares, apenas 5 dólares más que el monto anterior. Esto equivale a unos 4.378 bolívares al tipo de cambio vigente establecido por el Banco Central de Venezuela (BCV).
Señaló además que más de cinco millones de pensionados recibe este pago integral, los cuales se depositan a través del Sistema Patria.
Maduro también adelantó la creación de un nuevo bono de protección familiar, del cual no ofreció mayores detalles.
Un «ajuste precioso»
Maduro justificó el ajuste como parte del «plan de recuperación progresiva» y dijo que busca “proteger el poder adquisitivo”. Lo calificó de un «ajuste precioso» ante las sanciones impuestas por el gobierno de Donald Trump.
«Es un ajuste precioso porque estas últimas medidas de sanciones contra la empresa petrolera, contra las inversiones petroleras, tenían el objetivo de quitarnos todos los reales, todos los ingresos. Les puedo decir a los imperialistas y a la criminal de la derecha fascista, fracasaron», opinó.
Señaló que se mantendrá la indexación a la tasa del Banco Central de Venezuela.
Aunque este aumento representa un alivio parcial, los trabajadores siguen exigiendo salario mínimo acorde con el costo de la canasta básica, estimado en más de 500 dólares mensuales.