¿Es la negociación entre el gobierno y la oposición la clave para el levantamiento de las inhabilitaciones?

12 septiembre, 2023

Desde hace años las inhabilitaciones políticas han sido usadas por el oficialismo como un arma para descartar a todos aquellos opositores que representen una amenaza potencial para la estabilidad del gobierno. De los 13 políticos que aspiran a la candidatura opositora para las presidenciales de 2024, al menos tres tienen prohibiciones para ejercer cargos públicos: María Corina Machado, Henrique Capriles y Freddy Superlano. Esta situación ha generado una sensación de incertidumbre en una población, bastante desmotivada, que entiende que la participación en las presidenciales de cualquiera de estos u otros líderes opositores no depende enteramente de la voluntad del pueblo sino del gobierno oficialista.

Machado, quien junto a Capriles concentra la mayor intención de voto para las primarias, ha dicho en reiteradas ocasiones que luchará hasta el final contra la inhabilitación de resultar electa como candidata el próximo 22 de octubre. Sin embargo, la líder del partido Vente Venezuela hace frente a un gobierno que desconoce plenamente los derechos de sus ciudadanos, por lo que analistas políticos y expertos consultados por El Nacional creen que el levantamiento a las sanciones que pesan en su contra es poco probable.

Nicolás Maduro dijo hace algunos días que no está dispuesto a darle luz verde a los líderes de oposición con inhabilitaciones políticas para que participen en la elección del próximo año. “Solamente les digo, muy suavecito: no te vistas que no vas”, manifestó el oficialista durante un acto en el estado Vargas.

Pese a la negativa, los expertos señalan que hay una posibilidad de levantar algunas inhabilitaciones a través de la negociación con el gobierno nacional, aunque no todos los candidatos podrían someterse a la consideración.

“Los dos candidatos con más posibilidades de ganar no tienen posibilidad de inscribir su candidatura en las presidenciales. Aquí la variable de la negociación tiene mucho peso y el candidato que puede trabajar con esta herramienta es Capriles. En el caso de Machado, se encuentra entre los políticos que no tienen el aval de Miraflores para el levantamiento de su inhabilitación a través de la negociación debido a su historial en cuanto a sus amenazas al régimen de Maduro”, señaló a El Nacional el politólogo Pablo Quintero.

Si en algo coinciden la mayoría de los analistas políticos es que el candidato de oposición que se presente en las presidenciales de 2024, más allá de obtener la aprobación de la población venezolana, debe tener el visto bueno del gobierno nacional o de lo contrario será neutralizado a través de mecanismos como la inhabilitación.

La comunidad internacional también podría jugar un papel importante en un posible levantamiento de las inhabilitaciones, de acuerdo con el analista político Luis Peche. “Herramientas como el levantamiento de sanciones o liberación de Alex Saab, permiten a muchos países negociar unas condiciones mínimas para las próximas elecciones presidenciales, que, en primer lugar incluiría respetar al candidato ganador de las primarias. Sin embargo, no es algo que parece muy factible en este momento”, señaló.

Mecanismos para la sucesiónAnte la posibilidad de que resulte ganador en la primaria un candidato inhabilitado, dentro de la Plataforma Unitaria se ha hablado de la sucesión como estrategia para elegir a otro aspirante que sí pueda inscribirse en las presidenciales de 2024.

“La oposición debe trabajar sí o sí en un plan de sucesión que sea realista y que tome en cuenta algo básico, importantísimo y fundamental que es la voluntad de los electores del 22 de octubre. Es decir, sería lo más lógico decir que si no puede ir el primer lugar, pase el segundo y así, ahora, el nivel de complejidad incrementa cuando vemos que son candidatos con propuestas y posturas muy diferentes. Creo que dependiendo de cómo sea el resultado, así debe ser planteada la política”, indicó Peche a El Nacional.

El analista explicó que en caso de que gane un inhabilitado, si la diferencia porcentual entre el vencedor y el segundo o tercer lugar es muy amplia, puede ser problemático utilizar la estrategia de la sucesión porque podría generar rechazo en la población opositora. “En este caso el inhabilitado ganador debería tener un poder de decisión muy grande en el candidato que finalmente participe en las presidenciales o el beneficiado por la sucesión plegarse a su propuesta política”, señaló.

Quintero agregó que ante la inestabilidad política del país, el tema de la sucesión debe estar sobre la mesa pero puede ser negociado, modificado o cambiado por los diversos sectores que hacen vida dentro de la Plataforma Unitaria.

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