El expresidente estadounidense Donald Trump llegó este jueves a la cárcel del condado de Fulton, en la ciudad de Atlanta, para entregarse a las autoridades, en el marco del caso judicial por intromisión electoral en el estado de Georgia. No obstante, salió pocos minutos después de haber ingresado y tras haber aceptado pagar los 200.000 dólares que sus abogados acordaron con la fiscalía.
Frente a la prisión se concentraron manifestantes que gritaban eslóganes dirigidos contra la fiscal de distrito Fani Willis, quien acusó al político y a otras 18 personas de intentar revertir los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en EE.UU. «¡Encierren a Fani!», coreaban los simpatizantes de Trump.
Los registros de la cárcel muestran que el exmandatario fue puesto bajo arresto y fichado con el número de recluso P01135809.
Se anotó que Trump mide 1,92 metros de altura y pesa 97,5 kilos. Asimismo, los datos especifican que tiene ojos azules y cabello rubio o fresa. El sheriff del condado de Fulton, Patrick Labat, indicó que también se tomo una foto policial de Trump.
Tras completar los registros necesarios, el magnate quedó en libertad bajo fianza, que fue acordada previamente y se fijó en 200.000 de dólares. La fianza incluye un cargo de 80.000 de dólares por presuntamente violar la ley de Organizaciones Corruptas e Influenciadas por Extorsión, conocida como la ley RICO, y 10.000 de dólares por cada uno de 12 cargos adicionales.
Trump pasó en la cárcel un total de 20 minutos. A continuación se dirigió hacia el Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson, de Atlanta, para regresar a Nueva Jersey.
La nueva imputación se da en un momento en el que Trump lidera las encuestas entre los candidatos republicanos que buscan la nominación presidencial del partido para los comicios de 2024. Por su parte, el político ha calificado en más de una ocasión como persecución política las investigaciones en su contra instrumentadas por la Administración del actual presidente, Joe Biden.
RT
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