La jornada cambiaria en Venezuela mostró una marcada discrepancia entre la tasa oficial del Banco Central de Venezuela (BCV) y el dólar paralelo, lo que pone de manifiesto la persistente brecha cambiaria que afecta la economía del país.
Según los datos oficiales, el dólar BCV abrió en 88,64 bolívares y se mantuvo estable hasta el final del día al cerrar en 88,72 bolívares. Mientras que el dólar paralelo inició la jornada en 109,27 bolívares y cerró en 112,30 bolívares, lo que representa un aumento de alrededor de 2,77%. La diferencia porcentual entre ambas tasas alcanza un alarmante 26,7%, revelando así la disparidad en el mercado cambiario venezolano.
Por otro lado, según información proporcionada por El Nacional, el dólar se posicionó este lunes en 116,89 bolívares, marcando un ligero aumento.Esta brecha cambiaría impacta directamente el costo de vida de los venezolanos. Muchos comercios fijan sus precios en función del dólar paralelo, lo que provoca que, aunque los salarios se calculen con el tipo de cambio oficial, los precios de bienes y servicios esenciales —como alquileres, transporte y tecnología— puedan ser considerablemente más altos, situación que genera una distorsión económica que afecta la vida diaria de la población.
A pesar de que el Banco Central de Venezuela ha intentado contener el aumento del dólar paralelo mediante estrategias como la oferta de divisas a través de subastas y ventas directas a bancos, la demanda en el mercado paralelo sigue siendo fuerte, lo que dificulta la estabilización del tipo de cambio.
En resumen, el mercado cambiario venezolano enfrenta desafíos estructurales significativos: inflación descontrolada, emisión de dinero sin respaldo y una falta de confianza en las políticas monetarias. Los expertos advierten que, sin una estrategia clara para cerrar esta brecha cambiaria, los ciudadanos seguirán lidiando con la pérdida del poder adquisitivo y el encarecimiento de bienes y servicios esenciales.
Con información de El Nacional