Laura Richardson, jefa del Comando Sur de Estados Unidos, expresó preocupación sobre la estabilidad democrática en Venezuela y el impacto negativo que según dijo tiene el gobierno de Nicolás Maduro en América Latina. Durante su intervención en la Conferencia de Defensa Sudamericana en Chile, la general subrayó que la democracia enfrenta un asedio global, utilizando a Venezuela como ejemplo claro de esa crisis.
“La democracia y sus valores fundamentales permanecen bajo ataque globalmente, y no tenemos que mirar más allá de Venezuela, donde Nicolás Maduro sigue socavando la voluntad democrática del pueblo venezolano”, señaló Richardson.
Y agregó: “Las democracias trabajan con el tiempo para ofrecerse a sus pueblos”.
Manifestó que Maduro también ha contribuido a una crisis migratoria sin precedentes, con aproximadamente 7,5 millones de venezolanos forzados a abandonar el país. Este éxodo ha intensificado la migración irregular en Suramérica y Centroamérica, lo que representa un desafío significativo para la región.
La funcionaria indicó que el apoyo a las instituciones democráticas en Venezuela ha disminuido, lo que pondría de manifiesto la fragilidad de ese sistema político en el país. La situación actual, afirmó, es un claro indicativo de que las democracias requieren tiempo y esfuerzo para consolidarse y ofrecer resultados a sus ciudadanos.
El 6 de agosto en una entrevista con Efe, Richardson sostuvo que el conflicto en Venezuela debe encontrar una solución democrática y no militar tras las recientes elecciones. Expuso la importancia de la transparencia en la publicación de los resultados electorales para reflejar la voluntad popular.
Consideró entonces que la mayoría de los migrantes preferiría permanecer en su país si existieran condiciones adecuadas, abogando por estrategias que garanticen estabilidad.
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