Al menos 41 personas han muerto por insolación desde el inicio del verano en el estado de Odisha, en el este de la India, una cifra que podría aumentar a más de cien si las autoridades confirman otras decenas de fallecimientos pendientes de autopsia.
En el actual verano, se han registrado 159 muertes en casos sospechosos de golpe de calor, de las cuales las autoridades han confirmado 41, mientras que han descartado 45 casos y otros 73 están siendo revisados, según un comunicado del Centro Estatal de Operaciones de Emergencia de Odisha citado por la agencia india PTI.
En las últimas 72 horas, las autoridades reportaron ocho fallecimientos atribuibles a golpes de calor, que están a la espera de la autopsia para certificar la causa de la muerte.
Odisha ha registrado varias olas de calor severas este verano, que en la India abarca entre abril y junio, con temperaturas que llegaron a rebasar los 45 grados en varias localidades.
Estas cifras son poco habituales en este estado costero, y junto a la humedad se combinan para disparar el riesgo de golpes de calor.
Aunque las temperaturas se moderaron en los últimos días, siguen superando los 40 grados en varias localidades, por lo que el Departamento Meteorológico de la India (IMD) mantuvo en su último boletín la alerta por ola de calor en Odisha hasta el sábado.
Mientras, las lluvias monzónicas comienzan a llegar a varios puntos de la India, y no tardarán en reducir las temperaturas a medida que se adentren en el subcontinente indio.
La India ha registrado un verano especialmente caluroso que ha provocado decenas de muertes sospechosas de insolación en el este y norte del país.
Algunos de estos decesos tuvieron lugar en el desértico estado de Rajastán, donde los termómetros llegaron a superar los 50 grados.
Las altas temperaturas marcaron las mastodónticas elecciones generales indias, que comenzaron el pasado 19 de abril y finalizaron el 1 de junio, y en las que el primer ministro, Narendra Modi, resultó reelegido para su tercer mandato consecutivo.
EFE