En un mundo dominado por hombres, Griselda Blanco, una mujer no solo construyó un imperio criminal, sino que se convirtió en una figura despiadada, a tal punto que el propio Pablo Escobar, considerado “El patrón del mal”, llegó a admitir que “La viuda negra” o “La madrina de la cocaína”, la figura que inspiró la serie de Netflix, era la única persona a la que temía.
Y es que para Griselda la piedad no era una moneda de cambio, pues construyó una red de narcotráfico en la que aprovechó desde los exiliados cubanos que llegaron a Miami hasta los sicarios latinos para sumir a la capital de Florida en el caos y la violencia. De hecho, muchos le atribuyen la creación de los asesinatos en motocicleta, una infame técnica que perdura hasta la actualidad.
Aunque en la producción protagonizada por Sofía Vergara se muestra a una Griselda como una madre abnegada con sus cuatro hijos, que algunas versiones aseguran que sí lo fue, esta postura no fue la misma para sus esposos, pues todo apunta a que fue la responsable de la muerte de sus tres maridos.
El primer hombre en llegar al altar con Griselda fue Carlos Trujillo, un conocido falsificador de documentos, cuyos trabajos le permitieron a una criminal en ascenso llegar a Miami, desde donde estableció su imperio.
Con Trujillo, la mujer tuvo a sus tres primeros hijos: Dixón, Uber y Osvaldo. El falsificador moriría de cirrosis, aunque más de una fuente cercana aseguró que Blanco fue la artífice de su fallecimiento.
Aunque tenía cierto “prestigio” en el bajo mundo, no sería hasta su matrimonio con Alberto Bravo que Griselda tendría un rol más importante en el tráfico de cocaína. Además de su esposo, el hombre era su mentor, construyendo su imperio gracias a los contactos de él y la empresa de lencería de ella.
Consolidada en el poder, Griselda inició una relación con Darío Sepúlveda, un joven que escalaba en el mundo del narcotráfico, quien tenía fama de galán y no tardó en llamar la atención de la lideresa criminal, que lo acogió como mentora y amante.
Se casaron y a los pocos meses se convirtieron en padres de Michael Corleone, una declaración de intenciones, pues hacía honor al capo criminal de la película “El padrino”. Las tensiones no tardaron en surgir y el hombre no dudó en dejar a la mujer y llevarse a su hijo consigo. Furiosa por el desaire, Griselda lo mandó a matar utilizando a sicarios disfrazados de policías, todo delante del pequeño.
El mayor de los hijos de la líder criminal podría haber sido el “responsable” de la captura de su madre, pues luego de que esta huyó a California, sus hijos se quedaron en Miami, donde una mujer llamó a la policía indicando que su hija estaba saliendo con quien parecía ser un narco colombiano. Las autoridades le habían perdido la pista a Griselda, pero al investigar al joven, consiguieron llegar hasta “La madrina”.
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