La migración que pasa por Colombia, desde Ecuador a Panamá a través de la selva del Darién, está controlada por el crimen organizado ante un Estado “ausente” en las fronteras, muestran los principales hallazgos de un nuevo informe publicado este jueves por la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (Wola).
“Desde los cruces informales o trochas en la frontera con Ecuador hasta cada paso del camino a través de la selva del Darién a Panamá son controlados por grupos criminales”, se lee en el informe Migrantes en Colombia: Entre la ausencia Estatal y el control criminal.
Los grupos que se lucran con los intentos de los migrantes de buscar una vida mejor en Estados Unidos son algunos que operan cerca de Ecuador y sobre todo el Clan del Golfo (o Ejército Gaitanista de Colombia-EGC), para quienes “las ganancias que extraen de las personas migrantes son actualmente, junto con la cocaína y la extracción ilícita de metales preciosos, la principal fuente de ingresos”.
Según datos de las autoridades panameñas, en lo que va de año más de 185.000 personas atravesaron la selva del Darién en su camino hacia Norte América, sobre todo migrantes procedentes de Venezuela, Ecuador, Colombia y China, mientras que el año pasado la cruzaron la cifra récord de más de 520.000.
Crisis humanitaria
Ante esta crisis humanitaria, ya que los migrantes se enfrentan a innumerables peligros naturales y climatológicos en esta peligrosa y montañosa selva y también a grupos criminales, “el Gobierno nacional no está haciendo lo suficiente para gestionar los flujos de migración, determinar quién pasa o proteger a las personas en situación de vulnerabilidad”.
“En todos los niveles de Gobierno, los organismos responsables están mal coordinados y rara vez presentes. Los puntos de control, patrullas y detenciones son poco frecuentes, así como los servicios humanitarios y el acceso a la protección (…) A lo largo de la ruta migratoria hay un vacío estatal que es llenado por grupos armados y grupos criminales”, apuntó Wola en el informe.
Además, esta oenegé también señala que la “trayectoria” del actual Gobierno ante la crisis migratoria en Venezuela “es preocupante” porque ahora “es más difícil” para los venezolanos “acceder a servicios en Colombia” y las vías para regularizar su situación migratoria “son muy escasas”.
En este contexto, la información que llega de Estados Unidos sobre las vías legales de migración es “confuso y poco claro” y los recursos que llegan para ayudar a Colombia y otros países a atender esta crisis “son escasos”.
“Estas opciones deficientes para gestionar la migración llevan a Wola a recomendar alguna versión de ‘salvoconducto’, incluso un corredor humanitario, poniendo fin al enfoque no intervencionista de Colombia”, concluye la organización, que recomienda crear un “paso seguro” a través del país andino, que debe aumentar su presencia estatal.
EFE