Arnold Schwarzenegger se siente como ‘un productor estropeado’ y piensa que su aspecto actual ‘apesta’.
El físicoculturista convertido en actor de 76 años de edad siempre ha sido conocido por su físico musculoso y ahora le resulta difícil mirarse en el espejo porque no le gusta la forma en que ha cambiado su cuerpo.
Hablando en ‘The Howard Stern Show’, dijo:
‘Sonrío porque todos los días me miro al espejo y digo: -Sí, apestas-. Miro este cuerpo, miro esos músculos pectorales que solían ser firmes, alegres y realmente poderosos con una estriación allí. Ahora simplemente están ahí colgados. Quiero decir, ¿qué diablos está pasando aquí?’
El actor continuó:
‘Una cosa es verse envejecer y perder cada vez más forma, pero la mayoría de la gente nunca ha estado en forma. Entonces, ¿qué significa perder la forma? Cuando has sido aclamado durante años como este cuerpo supremo, y tienes la definición y ves las venas bajando por tus abdominales, y ves las venas en la parte superior de tu pecho y luego… haces avanzar el reloj 50 años y estás ahí parado y ya no ves eso’.
Si bien el actor de ‘Terminator’ reconoció que luce mejor que la mayoría de la gente de su edad, no está satisfecho.
Declaró:
‘Nunca pensé que cuando tenía 30 o 40 años esto iba a suceder. Simplemente apesta’.
El también ex gobernador de California explicó que las cosas cambiaron para él cuando fue operado del corazón a los 50 años, dejándolo sintiéndose como un ‘bien estropeado’ debido a las limitaciones impuestas a su estilo de vida.
‘Esa fue la primera vez que me sentí un poco vulnerable. Cuando, de repente, el médico dice: -Ya no deberías levantar tanto peso-‘.
El protagonista de ‘Mentiras verdaderas’ ahora solo permite hacer dos comidas al día para mantener su peso bajo control.
‘Desayuno y ceno. No almuerzo porque el sistema simplemente se ralentiza y ya no quema tan bien las cosas’.
Pero a pesar de su insatisfacción con los signos del envejecimiento, Arnold insistió en que no está molesto porque sabe que esa condición no puede cambiarla.
‘La conclusión es que tengo 76 años. Estoy lleno de energía. Estoy lleno de entusiasmo. Estoy tan entusiasmado y emocionado como cuando tenía 30 años. Siempre veo montañas frente a mí para escalar y, mientras veo esas montañas, mantengo mi entusiasmo y emoción y ese fuego en mi estómago para seguir escalando, escalando y escalando’.
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