Más de tres millones de personas siguen sin electricidad por cuarto día debido a que el hielo y la nieve azotan Texas. Las duras condiciones climáticas han dejado a los conductores luchando en la explosión del Ártico mientras los operadores intentan restaurar la energía en el estado, que funciona con su propia red eléctrica.
Las imágenes tomadas por el cazador de tormentas profesional Charles Peek muestran carros en el lado de Texas de Stateline Road lidiando con la nieve, mientras que los del lado de Arkansas conducen en carriles despejados. Compartiendo la imagen, Peek tuiteó: “Gran diferencia en la remoción de nieve de #Arkansas y #Texas en #Texarkana”, una ciudad que se extiende a ambos estados.
Las condiciones se han vuelto tan difíciles que algunos tejanos incluso han tomado fotografías del hielo dentro de sus casas. Unos siete millones de personas también están bajo avisos para hervir el agua después de que el clima ártico comprometiera los sistemas de filtración de agua.
Los funcionarios dijeron que el equipo en las plantas de energía no podía soportar las temperaturas extremadamente bajas, por lo que el personal tuvo que dejar de proporcionar energía a los clientes o arriesgarse a un colapso total de la red.
ERCOT, que técnicamente es una organización sin fines de lucro, administra la red eléctrica del estado, que ha sido independiente del resto del país desde que existe la electricidad.
El director ejecutivo de ERCOT, Bill Magness, dijo que “no tenía idea” de cuándo se restablecería la energía, pero se evitó una “catástrofe aún mayor” apagando la energía.
Ha habido indignación por parte de los tejanos que quieren saber por qué no se preparó la infraestructura de respaldo, particularmente después de que una tormenta similar en 2011 causó los mismos problemas.
Jeff Dennis, director gerente de Advanced Energy Economy, cuestionó “¿A dónde fueron esas recomendaciones y cómo se implementaron? Esas serán algunas preguntas bastante clave”.
Aparentemente, no todos los generadores en el estado se actualizaron después de 2011 para abordar el problema, según el Texas Tribune.
Se suponía que el sistema de energía debía ser “acondicionado para el invierno”, pero esto se ha pospuesto ya que los cambios son costosos.
Los críticos afirman que el mercado energético desregulado de Texas ofrece pocos incentivos financieros para que los operadores se preparen para casos excepcionales de clima extremadamente frío.
David Tuttle, investigador asociado del Instituto de Energía de la Universidad de Texas en Austin, aseguró en un podcast reciente que “hay cosas que se pueden hacer, pero costará algo de dinero”.
Un funcionario de ERCOT, Dan Woodfin, explicó que las actualizaciones realizadas después de 2011 evitaron que los problemas empeoraran en una ola de frío similar en 2018, pero afirmó que el clima de esta semana era “más extremo”. Los expertos creen que reiniciar los pozos de petróleo congelados en Texas será difícil incluso después de que se restablezca la energía, ya que la producción se ha desplomado en un 65%.
Por Metro
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